lunes, 1 de octubre de 2012

Satélite Miranda captura primeras imágenes este lunes

Satélite Miranda captura primeras imágenes este lunes


Satélite "Francisco de Miranda"

Durante el día lunes 1° de octubre se estima que el Satélite Miranda capture las primeras imágenes cartográficas de Venezuela, si las condiciones climáticas lo permiten, así lo indico el viceministro de Telecomunicaciones, Manuel Fernández.

“Todo va perfecto, tal y como estaba estimado y previsto”, informó Fernández, desde Pekín, China, a través de una llamada telefónica trasmitida por Venezolana de Televisión.

El satélite Miranda permitirá al Instituto Geográfico de Venezuela Simón Bolívar, obtener imágenes para la generación de información básica y de catastro, que permitirán conocer el territorio y sus cambios.

El satélite, lanzado a las 11:42 de la noche del viernes favorecerá áreas como la ambiental, la petrolera, la cartográfica, entre muchas otras.

Este satélite es producto del convenio estableció entre China y Venezuela en mayo del año 2001 y fue ensamblado por un equipo de 54 venezolanos formados en el país asiático.

El dilema de la derecha venezolana

El dilema de la derecha venezolana

x Reinaldo Iturriza López

 La derecha más rancia, esa que encarna Capriles Radonski, ha decidido disfrazarse de “izquierda”. Pero popular y revolucionaria, eso nunca lo será

“Me ubico en el corazón de nuestra Venezuela, viendo hacia la izquierda”. No deja de resultar curioso: uno lee la frase, sin saber todavía a quién se le atribuye, y de inmediato sabe que algo anda mal. Es sencillo concluir que se trata de una impostura. Hay algo que no encaja: un cierto exceso que raya en la cursilería, una construcción gramatical tan “perfecta” que resulta artificial.

Pongámoslo así: Chávez hace campaña y lo que logra proyectar es que más que un candidato, incluso más que un Presidente, el que habla y se desplaza es un líder popular. Usted podrá desconfiar del pueblo y menospreciarlo, podrá espantarse cuando lo ve atestando las calles, podrá llamarlo ignorante y rabioso. Lo que usted no podrá dejar de reconocer es que ese pueblo se reconoce en Chávez.

Popular. La clave está en lo popular. Los expertos podrán versar sobre los tipos de liderazgo, y los asesores seguirán intentando convertir a tal o cual candidato en un líder político, pero lo que se llama liderazgo popular es algo que se forja desde abajo, que no se improvisa, y mucho menos se compra. Lo popular: eso que los entendidos pocas veces entienden.

Usted podrá disfrazar a Capriles Radonski de candidato de “izquierda” y podrá convencerlo de que se autodefina como tal, que es lo que ha hecho en entrevista concedida al diario español El País, y publicada el domingo 23 de septiembre. Podrá ponerlo a hablar de corazones, unicornios y arcoíris. Pero no podrá convertirlo en un candidato popular.

Digamos que se trata de un dilema shakesperiano: se es o no se es popular. He allí el dilema de lo que, sin riesgo de yerro, se puede llamar la derecha venezolana: cómo ser como el pueblo chavista. Para lograr vencerlo.

Claro, la derecha venezolana no puede serlo, pero tiene que intentarlo. En el camino, sus expertos, asesores o entendidos al parecer concluyeron que lo que sucedió en este país durante la revolución bolivariana es que el pueblo se volcó a la izquierda. Se “izquierdizó”, podría decirse.

¿Y si lo que aconteció es que lo que había de izquierda, en la calle, en los cuarteles, devino popular? ¿Si fue la izquierda la que se “popularizó”?

“¿Pero cuál izquierda? Chávez y su modelo están llenos de profundas contradicciones, de acciones absolutamente fascistas como cuando obligan a la gente a inscribirse en un partido político para tener acceso a beneficios”, declaró Capriles Radonski al diario español.

La pregunta es absolutamente pertinente: ¿cuál izquierda? De allí puede derivarse una lista larga: ¿la izquierda tránsfuga que hoy se sienta al lado de sus verdugos históricos? ¿Cuál fue la izquierda que se hizo hegemónica con Chávez?

Capriles Radonski, por supuesto, no llega hasta allá. Su única ambición consiste en lograr transmitir el mensaje de que Chávez es un izquierdoso facho, avejentado y trasnochado, mientras él mismo manifiesta sentirse “muy cómodo con la definición de progresista porque significa tener una visión abierta en términos económicos, pero teniendo claro que la economía tiene que estar al servicio de la sociedad”.

En otras palabras, Chávez representaría una izquierda rancia, que huele feo. En cambio Capriles Radonski sería el portaestandarte de una izquierda nueva, lozana, “abierta”, todavía sin fecha de vencimiento.

Como no puede ser de otra forma, el candidato-producto que la oligarquía especuladora pretende vendernos como nuevo, expele el tufillo neoliberal: “En lo económico, mi plan es atraer a la inversión extranjera. Hoy no viene nadie a invertir”, cantinela sobre la seguridad jurídica, etc. Pero atención con lo que viene: “Planteo aumentar la producción petrolera, pero también abrir la economía a otras áreas: turismo, agricultura, oro, gas, carbón, hierro, bauxita, coltán. Más que ajustar el tipo de cambio, hay que cambiar el modelo”.

Con todo, el premio se lo lleva una frase que deja colar como quien repite algo obvio: “Venezuela nunca ha sido gobernada por la derecha”.

Así mismo como usted lo está leyendo: José Antonio Páez, Antonio Guzmán Blanco, Juan Vicente Gómez, Marcos Pérez Jiménez, Rafael Caldera, Carlos Andrés Pérez, todos, según Capriles Radonski, presidieron gobiernos de izquierda. Una izquierda… cuál es la palabreja que la intelligentzia “progre” no puede dejar de usar… ¡decimonónica!, una izquierda decimonónica y fracasada de la cual Chávez sería su versión más acabada.

Visto así, Capriles Radonski, el izquierdista, no vendría a liberarnos de un yugo que dura ya ¡catorce años!, como repite en cada discurso, sino de una verdadera calamidad que sobrepasa los 180 años, y eso si decidimos seguir la convención y contamos desde 1830.

Tal vez eso explique por qué, en rueda de prensa ofrecida el pasado 25 de septiembre, representantes del Comando Venezuela se refirieron al acto de cierre de campaña de Capriles Radonski, que tendrá lugar en la Avenida Bolívar de Caracas, como el “Gran Caracazo”. Un “sacudón” han prometido.

El razonamiento parece ser el siguiente: de la misma forma que basta con autodefinirse como “izquierdista” o “progresista”, sería suficiente con invocar la rebelión popular del 27 de Febrero de 1989 para lograr disimular un programa de gobierno de inocultable corte neoliberal y, por tanto, profundamente anti-popular.

Forma parte del mismo dilema de la derecha venezolana: no haber entendido todavía lo que aconteció el 27F del 89, no entender al chavismo, pero hablar de él, copiarlo, intentar “representarlo”. Hace tiempo que una parte de la izquierda venezolana, de por sí pequeña, logró entenderlo. Una parte. Ni siquiera toda.

Pues bien, ahora es cuando la derecha más rancia, esa que encarna Capriles Radonski, ha decidido doblar la esquina y disfrazarse de “izquierda”. Pero popular y revolucionaria, eso nunca lo será.

El Zulia cantó con el Corazón del Pueblo, Hugo Chávez

Argenis Chávez: “Hemos detectado actos de sabotaje”

Argenis Chávez: “Hemos detectado actos de sabotaje”


El presidente de CORPOELEC, Argenis Chávez

El presidente de CORPOELEC, Argenis Chávez denunció actos de sabotaje en algunos puntos del territorio nacional: “Hemos detectado actos de sabotaje” indicó durante una entrevista en Venezolana de Televisión.

Mencionó dos casos como la interrupción del servicio eléctrico en Catia, que se produjo por el lanzamiento de un objeto a las líneas de tensión que surten al sector, asimismo comentó que en el estado Falcón se produjo un acto de sabotaje , lo que resultó en la detención de dos personas que fueron encontrados lanzando objetos a las líneas de media tensión para suspender el servicio eléctrico.

Indico que “hay pruebas al respecto” y que la institución eléctrica se encuentra realizando un proceso de enlace entre el Poder Popular y las autoridades para que este tipo de casos sean denunciados.

Destacó que mediante un convenio entre CORPOELEC y PDVSA se están llevando a cabo proyectos importantes por medio de los cuales se están instalando unos 9 mil mega vatios en todo el país en las zonas con mayor deficiencia eléctrica.

Impresionante concentración popular recibió a Chávez en Cabimas, Zulia (+Fotos)


Impresionante concentración popular recibió a Chávez en Cabimas, Zulia (+Fotos)










Chávez estará en Barinas, Portuguesa y Cojedes este lunes

Chávez estará en Barinas, Portuguesa y Cojedes este lunes
El candidato socialista detalló que el martes 2 de septiembre visitará los estados Lara y Yaracuy, el miércoles 3 recorrerá a los estados centrales de Carabobo y Aragua y que el jueves 4 de septiembre el cierre de la campaña se llevará a cabo en la avenida Bolívar de Caracas


Los llanos de Barinas, Portuguesa y Cojedes recibirán este lunes al candidato de la Patria, Hugo Chávez, en la recta final de la campaña electoral revolucionaria, de cara a los comicios presidenciales a realizarse el próximo 7 de octubre.

Así lo informó este domingo el líder revolucionario, Hugo Chávez, durante un acto multitudinario realizado en la avenida H, del municipio Cabimas del estado Zulia al occidente del territorio nacional, donde además detalló que el martes 2 de septiembre visitará los estados Lara y Yaracuy.

Asimismo, aseguró que el miércoles 3 de septiembre recorrerá a los estados centrales de Carabobo y Aragua y que el jueves 4 de septiembre el cierre de la campaña se llevará a cabo en la avenida Bolívar ubicada en el centro de Caracas. “Y el jueves todos para Caracas, vamos a desbordar Caracas”, exhortó el Comandante de la Revolución Bolivariana.

Capriles cierra su campaña en Caracas con discurso centrado en Chávez

Capriles cierra su campaña en Caracas con discurso centrado en Chávez

Cierre de campaña de Capriles

El candidato de la derecha criticó las propuestas de la revolución, entre ellas la de preservar la vida en el planeta y salvar a la especie human

El candidato de la derecha a la Presidencia de Venezuela, Henrique Capriles Radonski, cerró este domingo su campaña electoral en la avenida Bolívar de Caracas, desde donde ofreció un discurso en el que estuvieron ausentes sus propuestas de gestión y estuvo dedicado en su mayor parte al plan de Gobierno del aspirante socialista, Hugo Chávez Frías.

Capriles mostró en la tarima, a la que llegó a bordo de un camión pasadas las 2:00 de la tarde, un tríptico contentivo de las ideas de Chávez, que, según dijo, le dieron unos “amigos del partido oficial”, y criticó las propuestas de la revolución, entre ellas la de preservar la vida en el planeta y salvar a la especie humana. “¿Quién nos salva a nosotros?”, se preguntó el candidato en su discurso de 45 minutos, el más largo que ofreció durante la campaña.

“Les invito a leer este programa y ver si está reflejado alguno de los problemas de los venezolanos”, sugirió el candidato de la derecha a sus seguidores, en referencia al plan de gobierno de Chávez.

A quienes querían conocer sus propios planteamientos para la jefatura del Estado, los instó a revisar el programa de la derecha, el cual estaría contenido en un libro que mostró desde la tarima.

Capriles, vestido con una camisa y gorra tricolor, aseguró que sus soluciones a los problemas del país en materia de vivienda, salud, educación y seguridad están en ese programa.

Del plan de gobierno de Capriles hay varias versiones, que pasan por el documento firmado el 23 de enero de 2012 por los precandidatos de la oposición que se midieron en las primarias de febrero y las ofrecidas por personas cercanas a su candidatura, hasta lo dicho por Leopoldo López, integrante de su comando de campaña, quien dijo que el verdadero programa del candidato es “lo que él dice” en sus discursos.

Aumento del salario mínimo, “mejoras” a pensionados, un fondo para generar empleo y la promesa de que el próximo año, bajo su administración, regresaría al aire el canal privado RCTV, cuya concesión venció en 2007, fue apenas lo que mencionó Capriles ante sus seguidores como compromisos de su Gobierno e insistió en que “aquí está todo dibujado”, en alusión al libro donde estaría su programa.